Desde el momento en que nuestros hijos habían
nacido oímos, "Disfrútenlos ahora mientras que son
chicos"..."Hijos chicos, problemas chicos; hijos grandes, problemas
grandes" e incluso se nos dijo que un día este dulce niño nuestro se
convertiría en un extraño huraño que criticaría nuestros gustos, desafiaría
nuestras reglas y rechazaría nuestros valores. De modo que aunque estuviésemos
preparados para los cambios en la conducta de nuestros hijos, nadie nos preparó
para nuestros sentimientos de pérdida.
Pérdida de la cercana relación: (Quién es esta persona hostil que vive en mi
casa?)
Pérdida de confianza: (Por qué está actuando de este modo? Es algo que he
hecho...o que no he hecho?
Pérdida de la satisfacción de ser necesitada: (No, no tienes que venir, mis
amig@s vendrán conmigo.)
Pérdida de la percepción de nosotros mismos como protectores todopoderosos que
pueden mantener alejados a nuestros hijos de todo peligro: (Ya es más de
medianoche. Dónde está? Qué está haciendo? Por qué no llegó a casa todavía?)
Hay que estar "Alerta" pues ahora estamos criando a nuestros hijos en
una cultura más sórdida, más grocera, más Tosca, más materialista, más
sexualista y sobre todo más violenta que nunca. Mucho trabajo por realizar,
mucho esfuerzo que invertir! pero por amor a ellos lo lograrémos!!
0 comentarios:
Publicar un comentario